Este domingo fue presentado Somaris del destacado poeta, Gustavo Pereira, título que abre una nueva Biblioteca en nuestra editorial homónima de este importante autor venezolano que plantea recoger el legado literario del poeta de los somaris.
La primera pregunta que se hace la gran mayoría de los lectores acuciosos es qué es un Somari. Freddy Ñáñez, viceministro de comunicación, confesó que si esta pregunta se la hubiesen hecho hace 20 años, hubiera mordido el anzuelo de explicar qué significa, en esa loca necesidad de buscar una razón a todo.
“ Hoy por hoy, un Somari podría ser un consejo, una confesión de amor, una protesta política. Si algo no es un Somari, es un gesto de retórica”, puntualizó.
El poeta y ensayista, Gustavo Pereira, escribe desde los 11 años. Son tan importante su letras, que realizó el preámbulo de la Constitución Bolivariana de Venezuela. Su vida ha sido entregada a la sensibilidad y a la razón.
El presidente del Centro Nacional del Libro, Raúl Cazal, contó la anécdota que en un principio, el ejemplar Somaris, se iba a llamar “Todos los Somaris”, pero al preguntarle a su autor si no iba a escribir más, decidieron cambiarlo.
Cazal detalló que el nuevo ejemplar de Pereira, recopila Somaris publicados durante décadas, desde 1970. El lector se asombrará al encontrar esa conjugación entre lo contemporáneo y lo ancestral, pues quien firmó el libro aprendió lenguas originarias.
En su participación el poeta Héctor Padrón explicó que los lectores tienen una deuda con Pereira que crece con cada verso, porque nos invitó a descubrir parte de nuestro costado indígena. “Es una deuda impagable que trato de llevarla en el corazón para que me siga alimentando”.
Gustavo Pereira, destacó que ser poeta trae privaciones. “ Sin duda, es un destino. Los destinos no se escogen, se conforman con base a realidades…La poesía es la composición entre la razón y la sensibilidad, pero privilegia la sensibilidad”.
El eminente venezolano, confesó que cuando llegó a Caracas, su espíritu se llenó de gratitudes al ver la edición del libro, de la mano de Monte Ávila Editores; a pesar de la fuerte lluvia.
Cerró recitando parte de su nuevo libro: “Hay una paz que se alcanza en la humildad, pero es la que más cuesta”.